
Las lámparas fluorescentes T8 de 120 cm (anteriormente de 36 vatios) han sido el estándar para la iluminación en todo tipo de espacios durante muchos años. Estas lámparas tubulares con casquillo G13 proporcionaban una distribución de luz amplia y uniforme. Ahora que la producción de tubos fluorescentes tradicionales está finalizando debido a las normativas europeas, nos centramos en alternativas LED de bajo consumo. Reemplazar un antiguo tubo fluorescente de 120 cm por una versión LED es una decisión inteligente que reduce sus costes de energía y prolonga la vida útil de su iluminación.
]Reemplazar un tubo fluorescente de 120 cm (36W) por un tubo LED de 120 cm de la misma longitud ofrece beneficios inmediatos. Los modernos tubos LED de 120 cm consumen significativamente menos energía, a menudo entre 14W y 18W, mientras proporcionan una potencia lumínica similar o incluso superior. Esto se traduce en un ahorro energético inmediato y contribuye a una menor huella de carbono. Además, los tubos LED no contienen mercurio y duran mucho más que los tubos fluorescentes tradicionales, lo que reduce la frecuencia de reemplazo y los costes de mantenimiento.
Para ofrecer una imagen clara de las diferencias entre un tubo fluorescente tradicional de 120 cm y su reemplazo LED, aquí presentamos una tabla comparativa práctica. Esta tabla ayuda a estimar los beneficios al considerar el cambio.
Característica | Fluorescente tradicional de 120 cm (36W) | Tubo LED de 120 cm (reemplaza 36W) |
---|---|---|
Consumo de energía | 36 vatios | 14-18 vatios (hasta un 60% menos) |
Vida útil | Hasta 20.000 horas | Hasta 70.000 horas |
Tiempo de encendido | Breve calentamiento, a veces con parpadeo | Luz completa al instante, sin parpadeo |
Sustancias peligrosas | Contiene mercurio | Sin mercurio |
Mantenimiento | Mayor (requiere reemplazo más frecuente) | Menor (requiere reemplazo menos frecuente) |
Calidad de la luz | Estándar | Consistente y a menudo con mejor IRC |
Instalar un tubo LED de 120 cm en una luminaria existente es, por lo general, un procedimiento sencillo. El método depende del tipo de balastro presente en la luminaria: convencional (EM) o electrónico (HF).
La mayoría de las luminarias fluorescentes antiguas funcionan con un balastro convencional y un cebador. Al reemplazarlo por un tubo LED, es importante insertar el cebador LED suministrado.
Las luminarias con balastro electrónico no tienen un cebador independiente. Instalar un tubo LED en ellas es un proceso directo.
Para un rendimiento y ahorro de energía óptimos, cada vez más técnicos consideran quitar el balastro y conectar el tubo LED directamente a la red eléctrica (instalación directa). Sin embargo, esto requiere un recableado y debe ser realizado preferiblemente por un profesional cualificado.
Al seleccionar el tubo LED de 120 cm adecuado para sus necesidades, otros factores técnicos son relevantes además del método de instalación:
El flujo luminoso de un tubo LED se expresa en lúmenes, lo que indica qué tan brillante es la lámpara. Para la iluminación general en oficinas, almacenes o talleres, se recomienda un valor de lúmenes más alto.
La temperatura de color, medida en Kelvin (K), determina el carácter de la luz:
El índice de reproducción cromática (IRC) indica con qué fidelidad se representan los colores bajo la luz. Para la mayoría de las aplicaciones, un IRC de 80 o superior es suficiente. En entornos donde la precisión del color es importante, como imprentas o tiendas, es deseable un IRC más alto.
Preste atención a la etiqueta energética del tubo LED. Aunque el LED es generalmente mucho más eficiente que la iluminación fluorescente tradicional, también existen diferencias de eficiencia dentro de la categoría LED. Una etiqueta superior (por ejemplo A, B o C según la nueva normativa de la UE) significa una mayor emisión de luz por vatio.
Además de los tubos LED T8 de 120 cm, también existen otras opciones de iluminación LED adecuadas para aplicaciones similares, dependiendo de los requisitos específicos del espacio:
Con la eliminación gradual de los tubos fluorescentes tradicionales, el tubo LED T8 de 120 cm se ha convertido en el estándar para una iluminación eficiente y sostenible en una amplia gama de entornos. Esta transición no solo ofrece ahorros inmediatos en costes de energía y mantenimiento, sino que también contribuye a una gestión responsable en empresas y hogares. La disponibilidad de varios colores de luz y opciones de instalación significa que hay un tubo LED de 120 cm adecuado para prácticamente cualquier situación.